Existen diversas soluciones para la supresión de barreras arquitectónicas en comunidades de propietarios. Al igual que sucede con la obligatoriedad de instalar un ascensor, deberán realizarse trabajos que faciliten la accesibilidad total siempre que:

• El solicitante sea una persona con discapacidad o mayor de 70 años que vive o trabaja en el edificio. En este caso, no es necesaria la aprobación en junta de las obras.
• Una vez realizada la petición, los propietarios tendrán la obligación de asumir su parte del coste siempre que no exceda las 12 mensualidades ordinarias de gastos, tras descontar las posibles subvenciones a las que se opte.
• Si el presupuesto excede las 12 mensualidades, entonces el 51 % de los propietarios deberán votar a favor en junta. Si no se llega a un acuerdo, se podrán acometer los trabajos si el solicitante asume la diferencia de coste íntegramente.

Un aspecto clave de la accesibilidad y las barreras arquitectónicas es que no se refiere exclusivamente a la instalación de un ascensor en el caso de que la finca no disponga de uno. Aunque este equipo es esencial cuando existen varias plantas, en edificios que sí cuentan con ascensor también podría ser necesario buscar otras soluciones para garantizar la accesibilidad total hasta las viviendas, como las que indicamos a continuación:

1- Bajar el ascensor a cota cero
La mejor opción para salvar los escalones que se encuentran antes de llegar al rellano del ascensor, comúnmente en edificios de más de 20 años. En general, es necesario aumentar el recorrido del ascensor, desplazar la puerta de acceso a la cabina y bajar la cota del suelo del portal para salvar todos los obstáculos. No siempre es necesario, pero en ocasiones las comunidades aprovechan los trabajos para modernizar el ascensor y reducir el espacio necesario en el foso.